Foto archivo
SANTIAGO.-Una jueza de aquí, impuso ayer arresto domiciliario contra un teniente coronel y un segundo teniente de la Policía Nacional por la muerte tiros de un raso adscrito a la Dirección General de Seguridad de Tránsito Terrestre (Digesett) en el municipio Villa González, decisión que será apelada por el Fiscalía local.
La magistrada Yiberty Polanco de la Oficina de Servicios Judiciales de Atención Permanente de aquí, impuso la medida contra los imputados el teniente coronel José Ernesto de la Rosa Pérez y el segundo teniente Luis Antonio Montilla Lara, están acusados de matar al raso Alberto de la Rosa de la Cruz, junto al prófugo el cabo Jonathan Rodríguez Parra.
La medida de coerción dictada por la jueza Yiberty Polanco, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente, en contra de los oficiales, además de prisión domiciliaria, consiste en la colocación de grilletes electrónicos e impedimento de salida del país. Los familiares de la víctima quienes se trasladaron junto a vecinos desde Cambita Garabitos en San Cristóbal se mostraron indignados por el fallo judicial.
Mientras que el titular del Ministerio Público en esta demarcación, Osvaldo Bonilla, se mostró en desacuerdo con la decisión del tribunal, debido a que la medida no guarda relación con la gravedad de los hechos atribuidos a los agentes policiales ni con las pruebas aportadas.
«No solo colocan a los imputados en la escena del crimen, sino que también evidencian que dispararon en más de 15 oportunidades hacia la parte trasera del vehículo en movimiento en que iba la víctima, impactada por tres proyectiles”, apuntó el funcionario judicial.
De la Rosa iba en la parte trasera del vehículo Toyota Camry azul oscuro, el cual fue atacado a tiros cuando transitaba, junto a otras personas, por la calle Villa del Yaque del municipio Villa González.
En la solicitud de medida de coerción, el Ministerio Público, representado en la audiencia por las fiscales Yarily Toribio y Quirsa Abreu, establece que se trató de un accionar desproporcionado, en el que los imputados, además de otros dos agentes que están prófugos, violentaron las normativas y protocolos haciendo un uso desmedido de la fuerza.
Fuente: El Nacional
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